lunes, 2 de junio de 2008

Ver más allá. Ver a los otros.




Desprecio la desidia y el oprobio de los corazones vanos, soy un paria del amor desechable.


Ésta es mi razón de lucha.

A Demon le importan un carajo las sonrisas reprimdas, las raquíticas bienvenidas, el saludo diplomático.

Se ve, la rebeldía de su corazón erguido pasar de soslayo entre el pecho y la garganta
como una lanza perfora su propio inconciente, que poco tiene que decir
en cuanto es tarde
y muy temprano llegarán a buscarle

Acorralado, perseguido.
El héroe de la máscara azul dibuja con su corazón
la marca del daño que pretende causar.

Sus ojos no corresponden al brillo de su falsa piel
Listo y hambriento
Espera.